Para siempre

7 de agosto de 2022
“Abrí mis ojos a tu realidad,
no quiero perderme en lo ilusorio, en lo fugaz.
Yo quiero contemplar lo invisible.Quiero ser consciente de vos
y encontrar lo eterno en medio de lo terrenal,
acallar todas las voces que están demás
y detenerme a escuchar tus gritos, tus susurros
y tus silencios.Quita de mis ojos la ceguera
que me impide ver tu belleza
y dame sabiduría,
para construir con oro y plata
lo que dura para siempre.”Poema por Yamila Arce
Dios ha puesto eternidad en nuestro corazón (Eclesiastés 3:11) y es algo que nos cuesta entender: que esto es para siempre. Como dice Apocalipsis 22:5 reinaremos con él por los siglos de los siglos, después de ese tiempo de reinar con Jesús mil años y que venga el Padre va a pasar un millón de años, pero luego no es que cada uno se ira a su casa, sino que diez millones de años más y al termino de esto seguirán más años, no se terminará porque es para siempre.
Los que acepten este mensaje creyendo de que Jesús es el hijo de Dios nuestro salvador tienen este destino eterno, de la misma manera, Jesús estando en la tierra y los profetas dijeron que los que rechacen este mensaje tendrán un destino separado de Dios también para siempre.
Isaías 66:22-23 Isaías está terminando su profecía y nos dice que cuando Jesús venga restaurará todo de tal manera que quedará completamente nuevo, describe un poco lo que va a pasar en aquel tiempo cuando Jesús reine y el Padre venga. La dinámica será de semana en semana vendrán todos a adorarle. Esto será un poco lo que vamos a vivir de mes a mes, de semana a semana iremos a Jerusalén a ver a ese hombre y adorarle.
v.24 Jesús mencionó esto también en Marcos 9 hablando de evitar toda ocasión de caer en pecado, nos dice que mejor es entrar al reino de Dios con un solo brazo, con un solo ojo, con un solo pie antes de que ir al infierno con todo el cuerpo, donde el gusano nunca muere y el fuego nunca se apaga.
Este mensaje debería despertar una compasión en nosotros porque entendemos que el que no tiene un encuentro con el Señor hoy estará para siempre separado de él. Este mensaje es poderoso para potenciar la predicación del evangelio del reino porque la compasión que viene es para entender lo que significa estar para siempre con el Señor o separado de el para siempre.
Dios nos hizo eternos, nuestro espíritu y alma vivirán para siempre.
Este cuerpo mortal un día morirá pero después Dios nos dará un cuerpo resucitado que se unirá a nuestra alma y espíritu para vivir para siempre, esto sucederá con todos, algunos resucitarán para gloria y otros resucitaran para perdición.
2º Corintios 4:18 (NTV) Cuando muramos y dejemos este cuerpo terrenal tendremos un cuerpo eterno hecho para nosotros por Dios mismo, no por manos humanas. 2º Corintios 5:1-3 (NTV) Pablo está diciendo que cuando recibamos ese cuerpo nuevo es para vivir en la eternidad con el Señor. Cuando alguien muere en Dios su alma y su espíritu están en la Presencia del Señor. Pablo también menciona que cuando estamos ausentes en el cuerpo estamos presentes en la Presencia del Señor.
Apocalipsis 6 muestra que las almas de los mártires están delante de la presencia de Dios diciendo: ¿Señor hasta cuándo? Pero no es nuestro destino final, Pablo nos dice que no seremos espíritu para siempre, sino que algún día recibiremos un cuerpo nuevo preparado por Dios para reinar para siempre.
La Palabra nos dice que conforme vivamos en este corto tiempo que tenemos en la tierra afectará radicalmente cómo viviremos para siempre.
2º Corintios 5:4-10 (NTV) Pablo menciona que pongamos la mirada y el anhelo en las cosas que aún no vemos, que saquemos la mirada de los problemas actuales. Romanos 8:18 habla de las tribulaciones de este momento, no importa la magnitud del problema, cualquier problema, cualquier situación no se compara con la gloria que ha de manifestarse en nosotros cuando recibamos ese cuerpo nuevo. Nos menciona en v.19 que la creación gime por el día en que recibamos un cuerpo de hijo resucitado y que pongamos la mirada en la esperanza que está por venir.
Hebreos nos habla de lo que significa la fe, no es mirar para atrás, sino que es la certeza de que lo que estamos esperando aunque no lo veamos sabemos que pronto viene. La fe es estar totalmente ciertos de que la esperanza que tenemos es una convicción y certeza en nuestras vidas. Esta fue la actitud que hizo que esos héroes de la fe llegaran hasta el final en Hebreos 11. Hebreos también nos menciona que Moisés pudo llegar hasta el final porque estaba mirando al invisible, Abraham llegó hasta el final porque estaba mirando también lo que no se podía ver, miraba una ciudad no echa por manos humanas, sino que buscaba la Jerusalén celestial.
Las mujeres que describe Hebreos 11 tenían sus ojos puestos en alcanzar una mejor resurrección, estaban anhelando que el día que resuciten iban a tener un cuerpo que no sufriría y que serían capaz de estar delante de Dios para siempre.
Pablo remarca que no pongamos la mirada en los problemas de ahora porque no se comparan con la gloria que ha de manifestarse sobre nosotros, nos permitimos imaginarnos que en el cielo en este momento hay un lugar que tiene en la puerta un cartel que dice “guardarropa celestial” que es un lugar gigante donde entramos y hay muchos percheros preparados con cuerpos glorificados para nosotros. Cuando Jesús aparezca en las nubes habrá un evento increíble que 1º Corintios 15 lo llama “el momento en el que seremos transformados” el cual será cuando recibamos un cuerpo que viva para siempre y capaz de estar delante de él sin ser consumidos por su belleza y majestad.
Hay preparado en el cielo un cuerpo hecho por Dios mismo para cada uno de nosotros.
No sigue diciendo en 2º Corintios que como garantía nos dejó a su Espíritu Santo para tener la certeza de que tendremos cuerpos nuevos que vivirán para siempre. Sera tremendo ese día cuando le veamos y ya no oraremos con los ojos cerrados porque veremos cara a cara a ese varón judío para siempre.
Pablo dice en Corintios que solo una cosa busca: agradarlo, porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo para que cada uno reciba según lo que haya hecho ya sea bueno o malo, mientras vivíamos en este cuerpo mortal. Por mucho tiempo le hemos tenido miedo al tribunal de Cristo pero es la mejor noticia de nuestras vidas, no será un juicio para ser juzgados porque la sangre de Cristo ya pagó por nosotros, es un juicio para recibir recompensa. Este es un momento donde vienen los siervos para presentar los talentos que Dios les repartió, a los que el Señor le dará la recompensa por la fidelidad poniéndolos sobre mucho.
Una persona que es inocente anhela un juicio porque querrá que lo que le pertenece sea liberado, es como aquel que tiene una herencia y lo único que quiere es que esta se libere para recibirla. El día del juicio será el día de recompensas, no de salvación porque ya la hemos recibido por gracia, el Señor desde el momento en que le seguimos nos ha dotado de dones y talentos que debemos administrar para que cuando el venga nos pida cuenta de todo lo que nos ha dado, y de acuerdo como hayamos vivido acá esa recompensa nos va a posicionar.
San Mateo 16:27 (RVR) Nos habla de recompensa, cuando Jesús venga va a pagarnos a cada uno a la medida de como hayamos ministrado lo que nos dio. Romanos 14:10 (RVR) Este es el llamado, a la luz de como vivamos en este tiempo hay recompensa, por eso menciona Pablo “quiero agradarlo en todo”.
Debemos pedirle al Señor sabiduría e inteligencia para agradarlo en toda buena obra.
1º Corintios 3:10-15 (NTV) Una vez que todos llegamos a la fe en Jesucristo entramos al equipo de la construcción pudiendo elegir con que materiales queremos edificar pero el fundamento es uno solo: Jesucristo. Debemos tener el entendimiento del cuadro final que nos marca hacia donde estamos yendo, para que cada uno no haga lo que le parezca. Pablo aclara que aquel día del tribunal de Cristo cada uno llegara con su construcción y pasará como por un scanner, como en los aeropuertos. Cada uno mostrara sus obras, algunos pasarán al otro lado con toda la obra completa porque permaneció por sobre el fuego y otros pasarán con sus obras pero consumidas por el fuego.
Los que hayan construido con paja, hojarasca y madera el fuego los consumirá, pero los que hayan edificado con oro, plata y piedras preciosas el fuego probará esa obra y quedara en pie recibiendo así la recompensa.
El mayor fracaso de la vida sería pasar años construyendo algo que en segundos pueda ser consumido por el fuego.
Hay dos grupos de materiales: por un lado oro, plata y piedras preciosas con los cuales hay que trabajar para encontrarlos, hay que cavar e ir profundo y por el otro heno, hojarasca, barro, madera que son elementos que se encuentran a la vista siendo fáciles de hallar. Tenemos que saber elegir con qué materiales vamos a edificar.
Proverbios 2:3-5 (PDT) Debemos buscar los materiales como si fueran tesoros escondidos, son materiales para ponernos de rodillas y pedir a gritos al Señor la sabiduría (plata), fe (oro), tenemos que tomar la pala para cavar y pedir a gritos entendimiento. El termino inteligencia significa “escoger entre” una persona inteligente no es aquel que sabe mucho sino que sabe elegir entre muchas opciones, en este caso la persona que sabe elegir con qué materiales construye.
Una persona apurada que no tiene tiempo de elegir va por los materiales están a la mano. Debemos mirar cómo construimos, la salvación ya está garantizada, pero a la luz de que esto es para siempre, tenemos que entender que como vivamos acá afecta nuestra eternidad. Jesús dijo: no hagan tesoros en la tierra, sino en los cielos donde nada lo corrompe.
Apocalipsis 22:12 (RVR) Todo lo que hayamos construido y atesorado en el cielo cuando Jesús vuelva lo traerá para recompensar a cada uno según su obra. Debemos estar conectados y agradar en todo al Señor como decía Pablo, elijamos bien los materiales, da un poco más de trabajo pero perdura por la eternidad. Jesús advirtió a sus seguidores de ser libres de obras muertas, a una de las iglesias del Apocalipsis le dirá que sus obras ante los ojos de los demás parecen que están vivas pero ante sus ojos están muertas. Toda obra muerta es la que esta desconectada de Dios.
El Señor da sabiduría a quien se la pida para poder edificar correctamente.
Apocalipsis 3:1-2 (RVR) Acá Dios le habla a una iglesia para hacerle entender que esta desconectada de la fuente de agua de vida, están muertos en sus obras, perdieron el primer amor y se están valiendo de elementos que cuando pasen por el fuego serán consumidos. San Mateo 7:21-23 (NVI) Jamás los conocí, hacían obras muertas desconectadas de mí, dice Jesús, por eso sus obras serán consumidas. Lo mismo les pasó a las vírgenes, que no les pareció importante ir a la intimidad a cultivar aceite, no les pareció importante pedir entendimiento, inteligencia y sabiduría. No les pareció importante pasar tiempo con el primer amor y cuando llegó el esposo les declaró que no las conocía.
¿Cómo entramos en la dimensión de edificar lo eterno? Hay una llave: el temor de Dios.
El temor a Dios es la consciencia de su presencia, esta es la llave para hacer obras conectadas a él. El temor de Dios es la llave para construir lo eterno, es consciencia de que él está presente todo el tiempo. Estar conectado con Dios, no solo es el momento donde ponemos música y oramos, sino que podemos estar conectados con Dios haciendo lo que debemos hacer todos los días en la oficina, en casa con los niños, manejando, todo importa, cada palabra y cada mirada. Jesús dijo: donde estén dos o tres reunidos en mí nombre yo estaré. La consciencia de su presencia va a ser que edifiquemos lo que permanecerá para siempre.
San Lucas 10:38-42 (NVI) Un síntoma de desconexión es que estamos pendientes de lo que otros no están haciendo y no de lo que nos toca hacer a nosotros, por ende todo lo que hacemos muere. El problema de Marta en la historia no eran sus obras, no era que no estaba a los pies de Jesús escuchando, sino que su problema era que estaba desconectada. Cuando perdemos la consciencia de su presencia, cuando no tenemos temor de Dios puede estar en medio nuestro el mismo Jesús y no nos damos cuenta. Nos perdemos citas divinas cuando estamos desconectados. Marta estaba abrumada con muchas cosas para hacer, inquieta, preocupada y muchas veces estas actitudes nos hacen construir a las apuradas con lo que está a la vista. Cuando pasamos tiempo en su presencia nos hacemos de los materiales para construir lo eterno, pero cuando estamos preocupados por muchas cosas, inquietos, abrumados con muchos por hacer, lo primero que sacrificamos son esos momentos que nos dan los materiales eternos.
El problema no es tener mucho por hacer, el problema es no disfrutar del camino, es desconectarnos. No importa lo que estemos haciendo debemos hacer todo como para el Señor. Que Dios nos de la sabiduría para construir y disfrutar del camino. Desde el principio en la Biblia hay una sola narrativa: él quiere estar con nosotros (Génesis 1 y 2). El problema que tuvo el pueblo de Israel fue que Dios quería caminar con ellos, les dio el mana, de día la nube, de noche el fuego, él quería relacionarse con ellos, pero no lo entendieron. Muchas veces estamos preocupados de lo que debemos hacer y el Señor quiere que disfrutemos del camino, de la recompensa.
Dios quiere relacionarse con nosotros, quiere que estemos conectados y tengamos consciencia de su presencia.
Josué 1:8 (RVR) El mundo paga millones para conseguir libros, materiales que les digan cómo ser exitosos y prosperar en todo. La Biblia nos revela que meditar en su palabra de día, de noche y caminar en ella nos hará prosperar en nuestro camino y todo nos saldrá bien. Salmos 1:2-3 (RVR) Si cada día al despertarnos meditamos en su palabra y de noche volvemos a meditar en ella solo debemos esperar que todo nos salga bien.
Prosperar no es estar llenos de dinero, prosperar es estar llenos de Cristo.
Hay poder en orar y cantar la palabra, si al despertarnos en lugar de volvernos locos con todo lo que tenemos por hacer tomamos una porción de la palabra y hacemos de eso nuestra delicia prosperaremos en todo lo que hagamos. Queremos que aquel día cuando estemos delante de su presencia y pasemos por el scanner espiritual podamos escuchar de la boca del Señor: ¡Buen siervo fiel, en lo poco fuiste fiel por eso te hare caminar sobre lo mucho en la presencia de Dios para siempre!
“Señor, deseamos que nos desintoxiques, que nos devuelvas el apetito, el deseo por tu presencia, cuántas veces nos serviste manjares y por estar intoxicados con la comida de este sistema no pudimos ni siquiera probar un bocado. Señor, te pedimos perdón por tantas veces construir desconectados de tu presencia, queremos conectarnos a la fuente de agua de vida, queremos que nuestra fe se fortalezca, fortalece tu eternidad en nosotros para vivir para siempre contigo, Señor”.